Rasgos de nuestro estilo
En La vida es sueño, de nuestro Calderón de la Barca, el príncipe Segismundo hace frente a una situación insospechada hasta ese momento:...
Todas nuestras ideas, todos nuestros proyectos y aspiraciones, todos nuestros valores, se fundamentan en lo eterno, como afirma el primer punto de la Promesa.
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...tiene que elegir entre dejar rienda suelta a su instinto brutal, al que le ha llevado su cruel encierro alejado de los seres humanos, y su condición y deber de Príncipe Cristiano, que va regir el trono de Polonia; tras la vacilación, pronuncia el verso inmortal, que significa su toma de decisión para ser hombre Acudamos a lo eterno.
Todas nuestras ideas, todos nuestros proyectos y aspiraciones, todos nuestros valores, se fundamentan en lo eterno, como afirma el primer punto de la Promesa; el gran drama del hombre de hoy –y quizás de todos los tiempos– es encontrar la armonía entre su yo y lo que le rodea: el otro, la sociedad, el mundo, la historia…, Dios. A esta permanente zozobra no se puede hurtar la respuesta ni formular razones incompletas: hay que fundamentar. Las diferentes ideologías que en el mundo han sido se han afanado, inútilmente, en buscar panaceas, y todas han fracasado en el intento por no ir a lo esencial. No nos ocurre, por suerte, a nosotros, si somos consecuentes con un Ideario, que debe plasmarse en un modo de ser y en una manera de actuar.
La proximidad de la Semana Santa –Pasión, Muerte, Resurrección de Cristo, y consiguiente Redención para el ser humano– nos puede llevar a una reflexión profunda: con el texto de la Promesa y los inmortales versos de Calderón de la Barca: Acudamos a lo eterno |
Texto publicado en el boletín nº 169 de Trocha, de Abril de 2016
La viñeta superior es una adaptación de otra del "Manual del acampado" Editorial Doncel - 1968.
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Sección "Rasgos de nuestro estilo"
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